SER UN CUERPO
Ser un cuerpo en un terreno cerca del mar
oler la sal
que duelan los huesos
las cienes
los ceibos
las alas.
Que lloren las aguas,
este presente
añejo,
que se agrieta helado.
Este progreso
pobre,
frío,
asociado al cemento.
Ser un cuerpo que sabe
de la fragilidad de esta tierra.
Que sabe,
que no se la está escuchando.
Ser un cuerpo que escucha
que los ceibos,
están
llorando.
LECTOESCRITURA
LECTOESCRITURA
LECTOESCRITRUA
LECTOESCRITURA
LECTOESCRITURA
LECTOESCRITURA
1. f. Capacidad de leer y escribir.
2. f. Enseñanza y aprendizaje de la lectura simultáneamente con la escritura.
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Puesto que todo se escribe, incluso lo improvisado es escritura puesto que es composición instantánea y estamos ya en la escritura.Desde el momento en que hay lenguaje hay escritura.
Acasos surgem quando estamos disponíveis e flexíveis para entortar o espaço e assim alterar nossos procedimentos, alguns acasos vem carregados de significados e assim nossa missão por assim dizer é a todo tempo significar, resignificar, designificar e novamente tudo outra vez. Sabendo que não há erros e nem acertos, há tentativas na perseguição do presente como eternidade.
(Dramaturgia na linguagem da improvisação em dança. Dudude. Páginas 107, 106.)
Las posibilidades surgen cuando estamos disponibles y somos flexibles para deformar el espacio y así alterar nuestros procedimientos, algunos peligros vienen cargados de significado y, por lo tanto, nuestra misión, por así decirlo, es en todo momento significar, replantear, designar y nuevamente una y otra vez. Sabiendo que no hay errores ni aciertos, hay intentos en la búsqueda del presente como eternidad.
(Loïc Touzé,<< Lorque le chorégraphe devient auteur-concepteur>> (pp.111-121), en Céline Roux, Danse(s) performative(s), éd. L'Harmattan, coll. Le corps en question, Paris, 207, p 112. (Capítulo Com-poner página 118, libro Pensar con mover Marie Bardet.)
Mi nombre es Anaí de Álava, aunque mis padres son de Montevideo y yo nací en ahí en el 98, me crié en La Paloma, Rocha, Uruguay, tremendo balneario. Un cabo que supo ser dunas en constante movimiento. Al momento que compongo esto que estás viendo soy estudiante avanzada de la Licenciatura en Danza Contemporánea, Instituto Escuela Nacional de Bellas Artes, UDELAR. Esta Licenciatura abrió sus inscripciones por primera vez en el año 2018, en ese año fue que comencé. Hoy estoy cursando mi cuarto año y realizando un trabajo final de egreso desde el cual me zambullo en el cuerpo-territorio. La calidez y sinceridad con que la licenciatura me abrió sus puertas me permitió, desde el movimiento, la observación, el colectivo, lo procesual y afectivo, navegar en las aguas de mis archivos, reconocerme en mis senderos, mis trazos, huellas y relaciones. Tengo la oportunidad de tomarme dos semestres para practicar, investigar, contar-me, preguntarme, proponer y sorprenderme, y estoy muy contenta de haberme embarcado en esta. La nave no quiere llegar a puerto, resuena más con las corrientes y sus sorpresas, con las olas y sus fuerzas y con las estrategias y la creatividad de cada cuerpo al momento de actuar. En relación, siempre entintado y trazando-se en algún gesto, dejando alguna huella, un surco, una zanja o canaleta, una resonancia, fragancia, sonido, conjuro, risa, dibujo de vida. Por mas que me duela el cuerpo todo con la violencia que vivimos como humanidad, con la crueldad con la que nos relacionamos con el ambiente en el que existimos, con la prepotencia que nos paramos en la punta de nuestras propias narices para cantar el himno al humanocentrismo y tatuarlo en todo con una rigidez de cemento. También se, gracias a tanto amor que he recibido, que tenemos un corazón que va a ritmo, pieles que respiran el aire que movemos, afectos que nos hacen sudar las emociones y colectividades infinitas desde las cuales vivenciar procesos de aprendizajes continuos y encarnados, que nos descubren potentes y creativos, pulsantes y presentes. Para activarnos en el hoy desde una existencia confiada en su singularidad, contenida en lo colectivo y que sabe que el arte es una transversalidad y una potencia de vitalidad que lo tiñe todo.
Cdf Montevideo
27/11/1937
La Paloma, Rocha, Uruguay
Foto aerea por la IMM
Gelatina y plata
Cdf Montevideo
1930
Playa y barrio Pocitos, Montevideo, Uruguay
Foto aerea por la IMM
Gelatina y plata
"Evolución de fijación de sistema dunar en la zona alrededor del Cabo Santa María. Imagen aportada por de Álava y Google Earth 2015 terrametics."
Una oportunidad de co-manejo y de transición urbe - área protegida en el Municipio de La Paloma.
Proyecto en Manejo Costero Integrado. Informe final. Diciembre 2015
Playa La Mula, frente al chiringo Himalaya. Verano 2021- Foto Leando Borba
Versión digital de fancine A3. Esta pieza la realice en el 2020 en el marco del curso danza 5 como parte de mi investigación final de curso.
16 de agosto, La Paloma Rocha Uruguay:
Al principio llegué al terreno, entré por donde no solía entrar. Y caminé apoyándome mucho en la mirada, observando el suelo que pisaba y todo lo que aparecía en el camino. Había basura, chatarra, los restos de alguien que vino a cortar acacias para secar y tener leña. Hongos de varios tipos, chircas, rayitos de sol, varias especies de pastos. Yo sé que todo esto era duna antes. Me puse a buscar un lugar donde acostarme, sabía que era al lado del cactus gigante, pero demoré un poco en darme cuenta con certeza y firmeza de ir hasta ahí. Busqué primero en otros lados pero los abrojos y las hormigas lo tenían todo. Me arrimé al cactus y encontré un terreno afelpado, un musguito, verde fluorescente brillante, me acosté y todo el cuerpo me lo agradeció. Cerré los ojos con la última imagen del cielo gris brillante, nublado. Me acosté y puse el grabador quise dejar registrado...lo que había estado escuchando. Motosierras, martillos, herramientas en varias direcciones. Y es que andan construyendo en el barrio, desde que arrancamos nunca hemos parado. El viento, me pareció que del norte, con solo pensarlo soplaba y me acariciaba las manos, los dedos de las manos que salen de mis guantes. Me movía el pelo un poquito. Los pájaros, podía escucharlos a distintas distancias, cantar, y no podía evitar transformarlos en poesía, dejarlos que, dejarlos que con sus cantos en movimiento aerearan todos mis pensamientos, los hicieran moverse. Podía verlos a través de su sonido. Yo llegué cansada, y me entregué completamente, me quedé casi dormida. pude sentir como mi cuerpo se iba aflojando cada vez más. Se iba entregando a este suelo blando, húmedo, cariñoso. pude notar cómo a pesar de tanto ruido de… tanto ruido de humano, tanta máquina, tanto auto, tanto martillo, tanta motosierra, tanto de lo mismo. cómo a pesar de tanto, una puede eliminar todo eso en tan poco y poner el foco en los pajaritos en el contacto del cuerpo con el suelo, en este espacio. Agradezco muchisimo el haber llegado a este espacio, es uno de los pocos terrenos que quedan, donde pasaba cuando era niña, donde jugaba. Uno de los pocos terrenos en donde todavía paso y tiene un pino seco, podrido, alto con varios halcones. Es el único terreno, en la vuelta, al que no le veo el cartel de se vende, el único que tiene suficiente mata como para albergar algunos aperiaces, sé que ellas andan por acá en esta vuelta.
Ensayo 1: Sobre y desde mi movimiento en la investigación en y desde la danza.
¿Qué harías si los bosques, montes y selvas del mundo se estuviesen quemando?¿Y si los glaciares inmensos amenazan con desaparecer, tapando la tierra con agua? ¿qué dejarías de hacer si fuese 2021 y aún continúa la guerra, el hambre, y el progreso asociado al cemento? ¿con quién te juntarías, que harías? ¿desde donde respirarías si no quedaran parches verdes en tu barrio en el balneario, si la plaza apesta a caca humana, si los animales empezaran a desaparecer y los ecosistemas pasan el desequilibrio para extinguirse por completo?
El presente es algo maleable y bruto, también atado con metal y frío. El presente duele, desgarra, acopla, insiste y nosotros nos movemos con eso, nos movemos y creamos. Estamos acá. Vengo viviendo cada vez mas feliz a pesar del destrozo, del desgarro, del dolor. Vivo queriendo y estando presente porque quiero reivindicar la libertad que tengo, si es que la tengo, al menos la que me deja ser. Es desde acá que escribo, porque me muevo, es desde acá que creo y escucho, y comparto. Y es por ello que hago un ensayo de proyecto final. ¿Final de qué? por ahora percibo el comienzo
Cada une tiene su tinte propio, su lunar, su beso. Ante la sorpresa por lo desconocido una reacción, la propia, la improvisada. Se puede forzar, deformar, sustituir, significar y resignificar cada movimiento, así como se puede librar a lo espontáneo y tibio, observar, sentir, valorar, evaluar, decidir, hacer y dejar de hacer.
Hoy acá en un Balneario costero, un cabo, el Santa María, el que vive y lucha. Hoy aca re descubriendo me salada y afectada, cargada de afectos, de encuentros, de vibraciones, algunas sutiles y otras sutiles y violentas, camufladas en lo cotidiano, conformadas con lo normal. Enredadísima y con ganas, porque algo me dice que si no lo estuviera no tendría que pasar por los lugares que paso, preguntarme las cosas que me pregunto, ser quien soy, eso que se hace andando.
La escritura, la pienso y la escribo en y desde mi, muchas veces sin tinta ni papel o renglón. Muchas veces lo que escribo resuena en el aire, su onda, toca, choca contra las cosas, es el mundo. Suena la fuerza del mar en el lado sur de este cabo, suena y lo escucho cantar acostada con la cabeza al norte como si me mojara los pies. Andar descalza y sin palabras es lo que podría decir de estos últimos tiempos. Descubriendo la transparencia sincera que aflora en casa paso. En cada comunicación, entre vínculos. Caminar y sorprenderme desarmandome en risas, en suspiros, conociendo-me también desde otros cuerpos. Salados, sensibles, amigos, intimidad de almas. ¿Y si de repente se entorpece el flujo, el que andabas, se interrumpe, o fluye y deviene otro posible? Cuanta magia anida en un espacio de tierra de junto al mar.
Me, yo, mi, soy, tengo; y dale palabras me saco palabras restame palabras y déjame encuentro. Digo, acá estoy, ahora ya me siento escribiendo un cuento. Recitando algo que se expulsa de un cuerpo, que es contexto, con-texto. Soy componente compositor de un texto. Que mundo loco este en el que vivimos, mirá vecine! lo compartimos. Siluetas desnudas felices corriendo a la orila del mar dejándose comer por la espuma y la sal. Líquidos, jugos, desperdicios deliciosos de ser vida, de materializarnos en encuentros. Siempre en relación. Me lo digo como mantra, lo escribo, lo grabo, me lo canto en cada canción.
Entonces ahora que entré en calor y que me expuse al delirio y ya siento el codo de la mano que no para de garabatear estos sentidos. Puede ser que me anime a decirme. ……………………………………………………………………………………………………………………………………………Pero la pausa que hice fue extensa. Como de nuestro contacto el hecho de que no se tocara tu boca con la mía. Como releer y sentir una nueva lectura, algo así como el amanecer cuando arranca otro día. Gracias a vos y a mí, y a esta vida, cerremos los ojos y confiemos. Ejercitemos la felicidad, la alegría y el foco compartidos. Los corazónes que se aman por vibración, que en carne permite un abrazo enroscado, calor de cuerpo, piel, sentirse con el otro, apretujarse, como cachorros, ser hermanos.
En este recorrido tejo emociones y prácticas, paisajes, huellas, memorias que hoy son tatuaje también. En este tejido estan los hilos de mi práctica como tatuadora y la ritualidad a la que la intención me trae una y otra vez. El tatuaje que vengo realizando no precisa máquina, la técnica es muy antigua y mágica, cada tatuaje que hago se construye de un punto junto a otro punto, junto a otro, y asi marca un presente compartido, que se inscribe, con todas sus partes, con cada una de sus necesidades, deseos y propósitos, se graba en el cuerpo. Se hace piel y respira.
PROCESOS
I
N
T
E
N
C
I
Ó
N
“El tatuaje amortigua la ofensa, la agresión exterior o el malestar interno. Materializa la efusión del sufrimiento, la transforma, la ritualiza, como si fuera una auto iniciación. Si el tatuaje constituye la huella indeleble de este estado doloroso, si es su memoria viva a flor de piel, evoca no obstante un pasaje, señala un renacimiento. En tanto espacio transicional, superficie-frontera entre sí mismo y el mundo, en tanto continente psíquico, según la teoría psicoanalítica del yo-piel (Anzieu, 1995) de Didier Anzieu, la piel no es un soporte de inscripción anodino. Mediante este acto aloplástico que es el tatuaje, la piel se convierte en el objeto de una reinversión a la vez material y simbólica. Mediante esta, el sujeto contiene el sufrimiento desbordante, se repara, se enraíza, se reinstituye, se reorigina.
Así, el tatuaje crea una piel de resistencia que da la cara y que permite al sujeto rehacer su cara externa, tanto en sentido propio como figurado.”
Viguier, Emma. (2016, enero- diciembre). Cuerpo-disidente, cuerpo-que se defiende. El tatuaje, una “piel de resistencia”. Revista Corpo-grafías: Estudios críticos de y desde los cuerpos, 3(3), p-p 14-31/ ISSN 2390-0288.
Punta del Diablo Verano 2021. Fotos por Martín Germino Hidalgo
Mauro Vazquez <3
No soy muy experto en la historia de los tatuajes, pero si se volvió habitual en tántas culturas la práctica de intervenir la piel con tatuajes, por algo debe ser. Ya sea para identicarte con algo, por arte, o por estética los tatuajes van acompañarte por el resto de tu vida, por eso eh intentado que mis tatuajes no solo representen algo para mí, si no que también me recuerden lugares, personas, momentos y etapas de mi vida. Nunca me tatue en un estudio, siempre lo hice con amigas, tanto para darles una mano (económicamente y para poder perfeccionar su técnica) como para poder tatuarme en ambientes especiales. Mi primer tatoo me lo hizo una amiga, lo hicimos en una sesión de 4 horas en la facultad, en el gremio de estudiantes en el que milite 6 años, un lugar muy importante para mí, del cuál me llevo hermosos recuerdos. En esa primer tatoo opte por inspirarme en un diseño de internet, no tenía muy claro que tatuarme, pero sabía que quería una luna, (fue una etapa de mucha noche en mi vida jaja). También quería que estuviera la naturaleza presente y algún animal. Luego de meditarlo decidí que quería hacerme un lobo en un bosque, aullandole a la luna. Los lobos aullan para reunir a la manada, por lo tanto me pareció una bonita idea. Y así entre risas, chelas y un poco de humo marchó mi primer tatoo.Para el siguiente pasaron un par de años, otra etapa de mi vida que me encuentra con muchos proyectos, oportunidades e ideas. Todas estas experiencias se encontraban girando al rededor de mi nuevo trabajo en la playa, un día caí en la cuenta de lo afortunado que era al ver ocultarse el sol todos los días del verano en el mar. También tome conciencia de todo lo que estaba recibiendo de ese lugar, su gente, sus saberes, y también la posibilidad de crecer económicamente. En paralelo una de las grandes personas que conocí en la paloma (Nani) estaba incursiónando el el arte de tatuar sin máquina, al ver sus trabajos no lo pensé más, y decidí tatuarme el atardecer del chiringo, ese atardecer que tanto me dió. Para ello primero nos quedamos con Nani hasta muy tarde haciendo el diseño (En el mismo chiringo) y elegimos comenzar el tatoo un 2 de febrero, día de iemanja. Así que a las 00hs después de 12 horitas de trabajo, comenzamos la sesión, del tatuaje del atardecer del chiri, en el chiri después de la fiesta de iemanja...sin dudas épico, un momento que voy a llevar conmigo siempre. Por último, pero para nada menos importante está mi tercer tatoo, también diseñado por Nani y hecho en handpoke. Esta vez le tocó a una palabra, una palabra que no conocía y descubrí este verano en esta misma playa. La palabra es Serendipia, y la misma cambió un poco mi concepción de la vida. Siempre pensé que las cosas pasaban por algo, que la vida nos sorprende y que muchas veces cuando las cosas no pasan como uno espera, es cuando más aprendemos. Estás cosas bellas que nos pasan casi sin querer alimentan nuestro existir. Por eso cuando descubrí y comprendi el significado de esta palabra no dudé en tatuarmela. Cómo no podía ser de otra forma, decidimos hacer el tatoo en el medio de una fiesta con amigos, el último fin de semana que estuve en la paloma, luego de haber ido por una semana y terminar quedándome un mes y 10 días...en fin Serendipias. Y así termina mi por ahora corta, pero muy sentida experiencia con los tatuajes. Espero sea de utilidad y podramos próximamente agregar más tatoos a la lista.
Punto Sur, Parador en la duna, desde 2020 ese padrón es uno de los 27 terrenos que aparece en la ley número 17.551 de expropiación. Desde que esa ley existe aldía de hoy (agosto del 2021) no se ha expropiado nada.
Una inquietud por lo concreto
Nosotros queremos a la vez lo intemporal y lo contemporáneo.
Pero por más que hayamos agotado las imágenes y hecho correr
las palabras como agua entre nuestro dedos, no habremos
conseguido sin embargo decir cómo sucede para que, tal
mañana, uno se despierte con un deseo de poesía.
Virginia Woolf
La lecture, L’écrivain et la vie.